En Cabecera del Llano, residentes denuncian la tala de dos árboles en un terreno entre el barrio El Jardín y el Parque Carlos Enrique Virviescas. Las dos especies taladas fueron un caracolí y un gallinero.
De acuerdo con la comunidad, dicho procedimiento fue solicitado por un residente de la zona al asegurar que estas especies amenazaban su vivienda y se encontraban en mal estado. Pero varios habitantes aseguran que los árboles no presentaban ningún signo de deterioro.
«La tala se dio dentro del área del parque y el permiso se lo dieron a un residente que incluso ha invadido predios de este lugar. Estos árboles, que están georreferenciados, estaban absolutamente a plomo y no tenía ningún problema fitosanitario. No sabemos por qué le dieron el permiso, si estas especias están en área pública», indicó Marcela del Pilar Gaviria, habitante de Cabecera del Llano
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Según mencionó Iván Vargas, secretario de infraestructura de la ciudad, el procedimiento se realizó con todos los protocolos establecidos por la autoridad ambiental y desde la administración municipal se procedió a incautar la madera, pues esta pretendía ser vendida en Bucaramanga.
«El hombre tenía el permiso requerido desde la CDMB y, ante la denuncia de los residentes, nosotros lo que hicimos fue disponer de la madera porque personas querían comercializarla en la ciudad. Ese fue el trabajo que hicimos desde la escuadrilla de poda y tala», mencionó Vargas.
Ante la situación, residentes del barrio le hacen un llamado a las autoridades para que se investigue y se tomen los correctivos pertinentes. Piden que se delimite nuevamente el parque y se siembre las dos especies taladas para compensar el daño ambiental.