La Procuraduría General de la Nación abrió investigación contra los dragoneantes del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC), Óscar Campos Sanabria y Wilson Giovanny Sáchica Medina, por presuntas irregularidades en la vigilancia y custodia del exsenador Iván Moreno Rojas.
Así mismo, se investigan presuntos privilegios que habrían sido concedidos a Moreno Rojas, condenado por el ‘carrusel de contratación’ en Bogotá, y si algunos permisos que supuestamente le otorgaron funcionarios de la Cárcel de San Gil, fueron concedidos bajo los parámetros legales y reglamentarios.
Al exsenador y exalcalde se le habría permitido salir del centro de reclusión, el 26 de junio del presente año para acudir a una cita odontológica de urgencia que, al parecer, tuvo lugar en Bucaramanga y no en San Gil, en un consultorio donde presuntamente estaría el gobernador electo de Santander, Mauricio Aguilar.
El ente de control decretó la práctica de pruebas para esclarecer las circunstancias de tiempo, modo y lugar, en que los implicados podrían haber cometido la presunta falta disciplinaria, y establecer los responsables de las otras anomalías que al parecer se vienen presentando en el establecimiento carcelario.
