“Un buen libro, Marcus, es un libro que uno se arrepiente de terminar”: es una de la frases que se incluyen en el epílogo de La verdad sobre el caso Harry Quebert y que sin duda resumen la sensación de pesadumbre (en el buen sentido) que genera finalizar la lectura de esta magnífica obra literaria.
Fue escrita por el suizo Joël Dicker, una joven promesa de la literatura del siglo XXI, y publicada en el año 2012. Con tan solo 27 años en aquel entonces, Dicker logra consolidar una novela magistral que aborda las entrañas de la labor misma de escribir a través de una estrecha amistad entre un alumno y su maestro, un amor prohibido entre una niña de 15 años y un hombre mayor y un crimen sin resolver por más de 33 años.
Es un relato entretenido y altamente adictivo que podrá sumir al lector por largas horas acompañando a un escritor joven y prodigio llamado Marcus Goldman quien se dirige a Aurora, un pequeño pueblo costero de los Estados Unidos, en la búsqueda de su maestro y mejor amigo, el famoso escritor Harry Quebert, para encontrar el camino que lo lleve a escribir una nueva novela. En dicho camino no solo encontrará la inspiración para su relato, también, deberá ayudar a resolver el misterio alrededor del asesinato de Nola Kellergan, una niña de 15 años desaparecida en 1975 y del cual es recientemente acusado su amigo Quebert.
Esta grandiosa novela cuenta con personajes, lugares e historias muy bien definidas que circudan la trama principal y mantienen constantemente un halo de incertidumbre ante cualquier certeza que el lector cree construir con base en las pistas y situaciones que acontecen entre 1975 y 2008.
Fue galardonada con el Gran Premio de Novela de la Academia Francesa (2012) y el Premio Goncourt de los Estudiantes (2012). Además, en el año 2018, MGM realiza una adaptación para la televisión con una miniserie de 10 capítulos, recibiendo buenos comentarios por parte de la crítica especializada.
Sin duda alguna, la lectura es uno de los mejores hábitos para cultivar en estos tiempos de cuidados y resguardo y más aún cuando se trata de una novela que desde el primer capítulo será “Knock Out” o un golpe directo a la lona en la letras magistrales de Joël Dicker.