Al menos un centenar de personas estaban violando el toque de queda y consumiendo bebidas alcohólicas en el sitio sin medidas de protección sanitaria.
El operativo se desarrolló en la tarde de este domingo cuando agentes de la Policía Metropolitana llegaron al lugar tras denuncias de la misma comunidad, a pesar de que la gallera clandestina estaba ubicada en una zona prácticamente rural.
Al percatarse de la presencia de las autoridades la mayoría de los asistentes huyeron dejando motos y carros abandonados, sin embargo fueron sancionadas al menos 15 personas, según el primer reporte.
En el sitio quedaron decenas de botellas de cerveza y diferentes licores que estaban consumiendo, los uniformados hallaron demás las evidencias de que allí se realizaban peleas de gallos.