El equipo de la ‘Ciudad Bonita’, el querido Atlético Bucaramanga, se juega este domingo dos de junio el paso a la final del torneo del fútbol colombiano ante el Deportivo Pereira, equipo oriundo de la ciudad conocida en nuestro país como ‘La Perla del Otún’. Con el equipo ‘Matecaña’ hay unas historias por contar y son las siguientes:
En 1994 los ‘leopardos’ hicieron tal vez la peor campaña de su historia y de paso se quedaron sin apoyo económico, ya que el equipo dependía mucho de la ayuda que llegaba desde la ciudad de Cali, concretamente del América y sus dueños, quienes les prestaban jugadores nacionales y extranjeros a nueve equipos del campeonato rentado.
Cuando los propietarios del onceno vallecaucano sucumbieron ante sus problemas judiciales, los directivos del Bucaramanga en cabeza de Tiberio Villarreal Ramos –máximo accionista del club-, no escaparon a dichos inconvenientes. Un grupo de empresarios locales compró el Atlético y sin muchos refuerzos de por medio y bajo la dirección técnica de los emblemáticos jugadores Jorge Ramoa y ‘Kiko’ Barrios, el equipo auriverde descendió el 14 de noviembre de 1994 enfrentando al Pereira en el estadio Hernán Ramírez Villegas, a pesar de haber ganado aquella tarde uno a cero con gol de Valencia.

Portada de periódico cuando el Atlético Bucaramanga descendió el 14 de noviembre de 1994
Ascendió en seis meses y en junio de 1995 volvió a la primera división. En el año 2001 sufrió su segundo descenso, el cual fue muy corto, ya que luego de bajar de categoría en noviembre, para el mes de diciembre se inventaron un triangular en Cartagena entre el Unión Magdalena, el Cúcuta Deportivo y el Bucaramanga. El equipo de Santa Marta y el nuestro recuperaron la categoría, la cual se volvería a perder el 16 de noviembre de 2008 de nuevo ante el onceno risaraldense. En esta oportunidad se despidió con goleada y humillación. Luego de muchas investigaciones, logramos establecer que varios jugadores contratados ese año, vendieron el descenso y todo se realizó con la complicidad de un dirigente nefasto como José Augusto Cadena, quien por aquellos años era el presidente del club. No sobra recordar que el Atlético duró siete años en su paso por la Primera B, lo cual se convirtió en un verdadero infierno para los hinchas del equipo.
Ahora la vida le brinda la oportunidad al Atlético Bucaramanga, de pasar a la historia si le gana el domingo al equipo dirigido por Leonel Álvarez. Hace año y medio Pereira ganó aquí y a los pocos días fue campeón del fútbol colombiano. Ya es hora de romper esa racha negativa y nada mejor que hacerlo, ante un equipo que en los últimos 30 años se convirtió en una piedra incrustada en los guayos de los jugadores del Bucaramanga. Los muchachos dirigidos por Rafael Dudamel saben que no hay otra oportunidad, es el domingo dos de junio, es ¡de una vez por todas!
FELIPE ZARRUK
Periodista La Cultural 100.7 F.M.