En una vivienda del barrio Chapinero de Bucaramanga fue capturado un hombre de 45 años que abusaba de su hijastra, una adolescente de 13 años. El sujeto, según se supo, tenía armas de fuego con las que amenazaba a la menor para que guardara silencio.
Lo lamentable del caso es que ni la madre ni otros familiares de la menor le creyeron, cuando en su momento denunció lo que le venía ocurriendo.
“Fueron los profesores de la niña los que denunciaron el caso, momento en el que se procedió a actuar”, señaló el comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, General Manuel Vásquez.
El capturado ya tenía en su prontuario sentencias condenatorias por los delitos de hurto calificado y agravado, porte, tráfico y fabricación de armas de fuego o municiones.